Nubes vaporosas,
Nubes como tul,
Llevad l’alma mía
Por el cielo azul.
Gabriela Mistral
Martina sale de paseo por el bosque con su perro Fito. Van junto a su caballo Evaristo.
El momento más feliz de Martina, es cuando pisa la tierra húmeda del bosque y juega con Fito a las escondidas de tronco en tronco.
Luego para descansar, se recuesta sobre las hojas caídas del aromo y comienza a imaginar que las nubes tienen muchas formas.
Se pasa todo el día allí, imaginando a las nubecitas en forma de dragones, palomas, bicicletas…
Y por supuesto…
Evaristo, su caballito, siempre ahí, cuidándola…
La nubecitas nocturnas se acercan y Martina debe regresar a su casa.
¡Vamos Fito! ¡Andando Evaristo!
Pero Evaristo no aparece…
La lunita nueva, le susurra a Martina que Evaristo ha cambiado de color, ahora es azul, es noche azul, caballito azul, y por eso Martina no lo encuentra.
"¡Ponte a buscar, Martina!"
Piezas para intercambiar:
Evaristo, el caballito. Martina. Fito, el perro.
Apto para jugar intercambiando las piezas