Cuando voy al Parque del Olivar, me gusta sentarme en una banca y mirar a los pajaritos. Algunos están tomando agua en la laguna de los peces, otros están tranquilitos en las ramas de los olivos. ¡También puede que pasen volando sobre tu cabeza!
Un día pasó algo sorprendente. Me paré cerca de un grupo de cuculíes que comían miguitas en la vereda y… ¡no se volaron!
Entonces, me quedé como una estatua estirando mi brazo, y de pronto vino hacia mí un gorrión y se posó sobre mi mano ¡que emocionante!
Yo quietecita, quietecita solo lo miraba, sonriendo.
Dato curioso…
No nos imaginamos la variedad de pajaritos que encontramos en el Parque del Olivar: mieleros, mosquetas silbadoras, cuculíes, palomas, gorriones, turtupilines, tortolitas peruanas, botón de oro, semillero negroazulado…
bonito seu trabalho com feltro!!!
ResponderEliminarWoow, they are so pretty! I love her outfit!!
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