Una enorme mariposa
monarca entró a la carpa de circo.
Justo en el instante en el que dos payasitos hacían su número montados en un caballo
…
El caballo quedó
enamorado de la monarca y en un abrir y cerrar de ojos partió siguiendo a la
mariposa, llevándose consigo a los payasitos que no habían terminado de hacer
sus piruetas…
Y así el caballito, con los payasos, siguieron el camino
de la mariposa monarca azul
… y siguen y siguen caminando…
Cuento para colgar
inspirado en la obra
de Chagall "Payasos
a caballo", circa, 1920.
De la serie "Trovadores de Tela y Papel", en exhibición en Café La Llave, Trujillo
este te quedó muy bello
ResponderEliminarlos payasitos están hermosos
...
me dan ganas de volar con ellos
un abracito de luciérnaga